
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
La película “Barbie” no para de tener récords desde su estreno el 21 de julio y el éxito de taquilla del verano está cerca de romper otro ya que detrás de “The Super Mario Bros. Movie” por un estimado de US$ 48 millones, “Barbie”, de la escritora y directora Greta Gerwig, parece destinada a ganar el primer lugar como la película más taquillera de 2023 en Estados Unidos.
El analista Paul Dergarabedian dijo: “Barbie” recaudó US$ 155 millones a nivel nacional en su primer fin de semana y la semana pasada se unió al club de los US$ 1.000 millones en ventas globales de taquilla, una hazaña que solo lograron unas 50 películas en la historia, ajustada por inflación. Si bien la “fiebre rosa” se ha desacelerado en la última semana, se estima que “Barbie” ganó US$ 33,7 millones este fin de semana para mantener su fortaleza en los cines.
Se estima que la comedia sobre la muñeca icónica alcanzó los US$ 525 millones a nivel nacional y casi US$ 1.200 millones en todo el mundo. “Barbie” recaudó US$ 10 millones solo el viernes, ganando un promedio de más de US$ 11,3 millones por día del 5 al 11 de agosto. “Barbie” superó la marca nacional de US$ 500 millones a mediados de su tercera semana, mientras que “The Super Mario Bros. Movie” necesitó más de cinco semanas para alcanzar el hito.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.