
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Después de que Kanye West criticara a la editora de Vogue, Gabriella Karefa-Johnson, en las redes sociales, la revista de moda emitió un comunicado condenando su comportamiento: "Vogue respalda a Gabriella Karefa-Johnson, nuestra editora global de moda y colaboradora desde hace mucho tiempo", compartió el medio el 4 de octubre. "Ella fue atacada personalmente y acosada. Es inaceptable".
La declaración también reveló que Gabriella y Kanye hablaron después de que terminó su desfile de Yeezy, donde él usó una camiseta de "White Lives Matter" (Las vidas blancas importan), un movimiento que Gabriella luego llamó "irresponsable".
"Ahora más que nunca, se necesitan voces como la de ella", continuó la declaración de Vogue. "En una reunión privada con Ye hoy, una vez más ella dijo su verdad de la manera en que se sintió mejor, en sus términos".
Kanye, de 45 años, también escribió en Instagram que se reunió con su "HERMANA" Gabriella durante dos horas el 4 de octubre antes de cenar juntos. "NOS DISCULPAMOS POR LA FORMA EN QUE NOS HICIMOS SENTIR", dijo el rapero. "EN REALIDAD NOS LLEVAMOS BIEN Y AMBOS HEMOS EXPERIMENTADO LA LUCHA POR LA ACEPTACIÓN EN UN MUNDO QUE NO ES EL NUESTRO".
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.