
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Después de que la modelo Bianca Censori, novia del rapero Kanye West, donde hizo una aparición sorpresa en los Grammys 2025 junto a su esposo, y dejó caer su gigantesco abrigo para revelar su cuerpo casi desnudo, el Departamento de Policía de Los Ángeles ha evaluado si su vestido transparente la metería en problemas legales.
“Los Grammy son un evento privado”, dijo el Departamento de Policía de Los Ángeles en un comunicado, “y nadie de la entrega de premios se ha comunicado con la policía con ninguna queja sobre cómo estaba vestida Bianca”.
Si bien los usuarios de las redes sociales especularon que la exhibición de Censori debería haber violado una ley, es poco probable que haya violado la ley de exposición indecente de California. Después de todo, la ley establece que una persona debe exponerse “intencionadamente o lascivamente” en “ cualquier lugar público o en cualquier lugar donde haya otras personas presentes que puedan sentirse ofendidas o molestas”.
Según las autoridades, no se presentaron quejas formales sobre el momento del joven de 30 años frente al paso y repetición de los Grammy.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.