
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Una de las supermodelos que revolucionaron los años 90, Claudia Schiffer sigue siendo icónica a sus 53 años. No solo es admirada por expertos de la industria, sino que ha hecho que su popularidad trascienda fronteras, convirtiéndose en sinónimo de "modelo de éxito".
Actualmente, Claudia compagina su carrera como modelo con la producción cinematográfica (ha producido la película "Argylle") y selecciona cuidadosamente sus apariciones en el mundo de la moda, lo que no ha disminuido en absoluto su fama. De hecho, en los últimos 24 años, solo ha desfilado en dos ocasiones, siendo la última el 22 de septiembre de 2023, en un show en el que debutó Natalia Bryant.
Schiffer se ha convertido en el rostro de la firma Ermanno Scervino para la colección Otoño/Invierno 2024-2025. En esta campaña publicitaria, posa frente al objetivo de Luigi & Iango, bajo el estilismo de Sissy Vian, con maquillaje de Georgi Sandev y peluquería de Lorenzo Barcella.
En esta campaña, que transmite la idea de Sport Couture característica de la firma y celebra la artesanía italiana, La supermodelo nos muestra su lado más sensual a través de tres impresionantes fotografías. En una de ellas, posa con una pelliza de piel de oveja con bordados que abraza su cuerpo y se combina con un microshort de lentejuelas XXL.
En las otras dos, Claudia, con el cabello en efecto wet cayendo sobre su rostro, luce un cárdigan masculino de punto grueso sobre un conjunto deportivo y sexy de tank top blanco y culotte a juego.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.