
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Kourtney Kardashian ya no aguanta a su hermana Kim Kardashian. Y es que Kourtney, quien se casó con Travis Barker por tercera vez en Italia el año pasado, alega que Kim usó la ceremonia romántica para promover sus esfuerzos profesionales.
Kourtney dice: "Mi hermana usó mi boda como una oportunidad de negocios. ¿Está enojada conmigo?". Y Khloé Kardashian parece confirmar el sentimiento con una palabra en su propio confesionario: "Furiosa".
Pero las tres hermanas mayores no son las únicas que opinan, ya que Kendall Jenner y Kylie Jenner también discuten la disputa que se avecina. Como Kendall le dice a Kylie, "Sentía que le habían quitado las vibras de su boda".
En cuanto a la propia Kim, la madre de cuatro hijos agregó que no tenía idea de dónde venía la ira y compartió en un confesionario, "Estoy realmente confundida sobre cómo se le ocurrió esta narrativa". Además, también le dijo a Khloé, "No podría haber sido más consciente. Dije, 'No hagas nada de lo que Kourtney usó para su boda'".
Pero para Kourtney, simplemente no parece haber lugar para la confusión. "La gente piensa que es un malentendido", dice, y agrega, "Pero no lo es". Como dijo la madre de tres hijos, "es lo que ella es en su esencia".
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.