
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Mientras que Shakira lanzó recientemente la bachata Monotonía, Thalía también lanzó nueva música disco con Psycho B**ch. Thalía supuestamente disparó en críticas contra su colega colombiana y el tema que ya es un hit.
"La canción me parece patética y Shakira una mujer dramática. Pienso que si ese hombre la dejó fue porque ya no la quiere. Ella debería considerarse y no tratar de dar lástima con ese tipo de canciones dedicadas a un hombre que ya no la quiere". Ante los rumores sin veracidad alguna sobre esos dichos, Thalía rompió el silencio a través de un comunicado emitido por su agencia de representación: Acoustyle Communications: Señalan en desmentir de manera formal la polémica. Ella mantiene una amistad de varios años. Thalía es reconocida por su carácter de mucha luz y muy positiva. Es un rumor falso.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.