
VIUDAS NEGRAS P*TAS Y CHORRAS | SERIE | MUCHO HUMOR Y CRITICA SOCIAL | FLOW, TNT Y HBO max | 2025 | RECOMENDACIÓN POR Mauro Patat
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Un representante del cantante Justin Bieber está respondiendo a las afirmaciones de que ha estado consumiendo drogas duras, diciéndole al portal TMZ que "es absolutamente falso".
En cambio, señala su equipo, ha sido un año "muy transformador" para Justin, ya que "terminó varias amistades cercanas y relaciones comerciales que ya no le servían".
Y a medida que se acerca el cumpleaños número 31 del ganador del Grammy el 1 de marzo, está concentrado en su familia y su música, no en especulaciones sobre su salud, que su representante califica de "agotadora y lamentable y demuestra que a pesar de la verdad obvia, la gente está comprometida a mantener vivas las narrativas negativas, salaces y dañinas".
Las especulaciones sobre Justin recientemente se dispararon cuando salió a grabar música en la ciudad de Nueva York y a apoyar a Hailey en Los Ángeles, y sus interacciones fueron analizadas en línea.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Anoche terminé de ver Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y todavía tengo los ojos húmedos. No solo por su historia judía cargada de tradición y códigos familiares, sino porque habla de algo que atraviesa a todas las familias, sin importar origen, fe o idioma: los vínculos. Los que tenemos. Los que no supimos cuidar. Y los que aún pueden repararse.
Durante años, cada junio se vestía de colores. Las marcas corrían a cambiar sus logos por arcoíris, influencers hablaban de inclusión con brillo en la cara, y hasta los políticos más cínicos publicaban una fotito con la bandera LGTBIQ+ para “quedar bien”. Era el pinkwashing en su máxima expresión: no era amor, era marketing. Pero este 2025, algo cambió. Algo se apagó. Algo se incendió.
Si Yiya Murano tuviera FLOW, esta sería su serie favorita. Acá no se matan con veneno, pero el humor es igual de letal.